A quien haya seguido la guerra civil en Siria no le habrá pasado desapercibido que los altos responsables eclesiásticos locales han tomado posiciones que contrastan con cuanto sugerían, en estos años, la prensa y los Gobiernos occidentales. Cuando se reclamaba, casi unánimemente, que Assad dimitiera, ellos apoyaban al Presidente siriano.

 

La celebración del centenario del genocidio armenio coincide con un renovado período de persecución de los cristianos. Pero ¿el genocidio fue una persecución anticristiana? Acerca de esto, es interesante notar que se confrontan dos interpretaciones.

 

La definición de “genocidio”, dada por el Papa Francisco a los acontecimientos de los que fueron víctimas los armenios en 1915, ha provocado la dura reacción de las autoridades turcas, quienes, después de convocar al Nuncio Apostólico en Ankara, S. E. Mons. Antonio Lucibello, han decidido llamar a consultas a su Embajador ante la Santa Sede para protestar contra las palabras del Pontífice, consideradas ofensivas y carentes de fundamento histórico.